Her will be done (Que ma voloté soit faite)

HER WILL BE DONE (QUE MA VOLONTÉ SOIT FAITE)

(Francia/Polonia, Julia Kowalski, 2025)

“La joven Nawojka, que vive con su padre y sus hermanos en la granja familiar, guarda un terrible secreto: un poder monstruoso, que cree haber heredado de su madre, y que se despierta cada vez que experimenta deseo. Cuando Sandra, una mujer libre y seductora, regresa al pueblo, sus poderes se manifiestan sin que ella pueda controlarlos.”

Tenemos aquí la primera de las dos últimas películas que más dudas me han causado, porque están “rascando” el aprobado pero les falla algo.

Her will be done comienza con un plano de una hoguera. Se está quemando ropa y un bolso, lo que hace suponer que dentro del fuego hay un cadáver. Hay un plano a un hombre (el padre de la protagonista), un plano a una versión más joven de la protagonista y en off escuchamos “Mi madre se arrodillaba ante Satán”. Se me dispara el cerebro. “Madre mía, qué películón de brujería satánica me voy a ver”.

Sublime Maria Wróbel…

Y así es, como si de una versión rural de «Carrie» (Carrie, Brian De Palma, 1976) se tratara la casi debutante guionista y directora Julia Kowalski nos lleva de la mano por una historia sobre el descubrimiento personal de una adolescente que quiere escapar del yugo de una familia machista y un trabajo que no desea en la granja familiar, y que se dispara con la llegada de Sandra (Roxane Mesquida es la actriz que de da vida a este personaje y vaya si lo consigue, está magnífica), antigua vecina del pueblo que se marchó tiempo atrás después de “un problema” (no se especifica) con un chico de la localidad.

Subyace durante toda la película una inquietud latente por el lento despertar de los poderes telequinéticos de Nawojka, magníficamente interpretada por Maria Wróbel, que como si de una mutante de La Patrulla-X se tratase se despiertan en la adolescencia.

… y sublime Roxane Mesquida.

Escena tras escena la película te va llevando al clímax inevitable, tensando como si fuese una cuerda de guitarra que a cada vuelta del clavijero se va afinando cada vez más pero con el riesgo de una rotura total el aguante de Nawojka hasta que al final de la película… [OJO, SPOILERAZO GORDÍSIMO] no pasa prácticamente nada. Todos en la sala esperábamos un “Carrie”, pero nada, nos quedamos con un final abrupto y descafeinado. 

Una verdadera lástima que toda la atmósfera conseguida a base de ese ritmo lento pero sin pausa en el que todo lo que ocurre es interesante y esa tensión acumulada durante toda la película quede en un “ahí os quedáis”. [FIN DEL SPOILERAZO GORDÍSIMO]

Pero aun así, buena película. Curioso que me gusta más después de pensarla para escribir esta reseña. 

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